Cristian Jaure, de 23 años, murió electrocutado días atrás en Berazategui mientras intentaba bajar a un guacamayo de un árbol para cobrar una recompensa de mil pesos. Su familia hizo una colecta para pagar el velatorio y reclamó justicia.

De acuerdo a los testimonios, el guacamayo se había escapado de la casa donde lo tenían como mascota y su dueño, un comisario local, se cruzó con Jaure en la calle y le ofreció dinero a cambio de que lo ayudara a recuperarlo.

Sin percatarse de los cables de alta tensión que atravesaban el lugar, el joven se trepó por una escalera de metal apoyada contra el árbol. En ese momento fue que recibió la descarga que le causó la muerte poco después de un paro cardiorrespiratorio en el Hospital Evita Pueblo, donde lo trasladaron de urgencia.

Tras la muerte de Jaure, familiares se reunieron frente a la casa del dueño del guacamayo para pedir justicia y, en su defensa, el comisario denunció que el joven no estaba rescatando ningún animal, sino que el joven estaba robando cables.

“El comisario de la Policía Federal le dio al chico una escalera metálica. El pibe roza el cable de la luz con la escalera y quedó electrocutado”, relató un vecino, tras lo cual negó que se tratara de un delincuente.

“Sabía que el pibe iba a quedar electrocutado. Acá hay algo raro. Los vecinos queremos justicia, que hagan algo, que se hagan cargo”, remarcó el hombre, que se identificó como Silvio.

En principio el caso fue caratulado como “Homicidio culposo” y es investigado por la Unidad Funcional N°7 de Berazategui, Departamento Judicial de Quilmes. En tanto, los efectivos tratan de establecer por qué había un alambrado electrificado en ese lugar.

Fuente: Crónica