| QUILMES | POLICIALES


Le robaron al hincha del “Abrazo del alma” en su casa de Solano

Víctor Del Aquila (66), el hincha sin brazos que saltó a la fama con la icónica foto del Mundial de 1978 que fue bautizada como “El abrazo del alma”, sufrió este último fin de semana un violento asalto en su casa de San Francisco Solano.

El hombre vivió allí toda su vida y, junto a su esposa no vidente, Gilda, habían salido a pasear a sus perros. Al volver, ingresaron a su hogar, de la calle 848, y se encontraron con dos delincuentes armados, que habían entrado por el patio trasero y llevaban los rostros cubiertos.

“Cuando los vimos yo pude escapar pero me quedé por temor a que le hicieran algo a mi señora, que es no vidente. Me pegaron y me tiraron al piso. Revisaron las habitaciones del primer piso y me hicieron subir con ellos. En ese momento, mi mujer, ciega como está, logró desatarse porque la habían maniatado y salió por la puerta de adelante y se cruzó con mi hijo que había venido porque se había olvidado las llaves de su departamento”, relató Víctor.

Y agregó: “Fueron hasta un destacamento policial de acá a unas cuadras, del lado de Almirante Brown y avisaron de la situación. Se dio aviso al 911 y vino la Policía. Los ladrones se fueron por el mismo lugar por el que entraron». De acuerdo a lo que se informó, lograron llevarse dinero en efectivo, objetos de valor como joyas y alhajas y una escopeta de caza”.

Momento después, agentes interceptaron un automóvil Ford Ka en las calles 816 y 891 y el conductor, al notar la presencia policial, se dio a la fuga y abandonó el vehículo a las pocas cuadras. Al revisarlo, se encontró en su interior una escopeta de caza que había sido robada de la casa de Víctor Dell’Aquila. En el caso interviene la Unidad Funcional de Instrucción N°7 de la fiscal Ximena Santoro, que está abocada a identificar a los delincuentes.

Victor Dell’Aquila perdió sus brazos en un accidente cuando tenía 12 años. El 25 de junio de 1978 fue protagonista de una de las fotos más icónicas de todos los mundiales. Apasionado por el fútbol, cuando el pitazo final había desatado la euforia por Argentina campeón en el Estadio Monumental, corrió por el campo de juego celebrando el título y se detuvo junto a los futbolistas Ubaldo Fillol y Alberto Tarantini, que se abrazaban arrodillados en un momento de máxima emoción.

El vecino de Solano, con las mangas flameantes de su pulóver, se inclinó junto a ellos en el momento en que el fotógrafo Ricardo Alfieri inmortalizaba esa imagen que recorrió las tapas de diarios de todo el mundo y que publicó en nuestro país El Gráfico. El periodista Osvaldo Ardizzone la bautizó como “El abrazo del alma” y Víctor sigue siendo recordado desde aquel día por aquel momento.

DesdeElPrimerDía Seguridad 262x300px

chama